Inmensamente amada

Realmente me tomo mucho tiempo para pensar, y me paseo detenidamente entre estos pensamientos, como si fueran un paisaje que se puede apreciar, describir, conocer milimétricamente.

Hoy me detuvo uno de ellos, uno de esos pensamientos que te buscan durante días, meses, años y que cuando te encuentran se te estrellan en la cara, puedes sentir el empuje, el atropello, casi como si te estuvieran provocando... pero es sólo un encuentro.

De pronto le di sentido a muchas cosas, a mi cambio de vida, a mi cambio de ritmo, a esta nueva forma de disfrutar cada día, a tener la piel bronceada de tanta libertad mientras mis amigos difícilmente pueden dormir por estar respondiendo llamadas o correos de trabajo.

Hoy me atropelló un pensamiento cuando la ponente lo soltó ignorando la violencia con la que me embestiría... ella dijo: "Hay personas que no saben recibir amor, que necesitan aprender a recibir amor".

Ya han transcurrido años sin que permita que me acaricien el corazón, sin decir un TE AMO, años en los que cualquier promesa me sabe a mentira con fecha de caducidad, en los que me escondo detrás de mi hedonismo para no ser amada. Mis cercanos me dicen constantemente que les duele verme sin un compañero, a lo cual respondo con toda mi autosuficiencia y con toda mi libertad para que no quede duda de que no necesito una media naranja, que yo soy una naranja completa. Hasta hoy entendí lo que ellos sienten (más allá de lo que ellos dicen, sí, lo que sienten) en realidad, para ellos, mi compañero es lo menos importante, lo doloroso es saber que no me dejo amar, lo doloroso es que no quieren verme llegar al final de mis días sin haber aceptado besos de buenos días, viajes a lugares hermosos, visitas en el hospital, abrazos de complicidad... y tantos momentos más en los que viene envuelto el amor.

Quizás en lo que yo no he sido clara es en el hecho de que yo ya tuve lo que muchas personas viven buscando toda su vida y que algunas nunca encuentran, yo ya tuve a esa persona tan afín a mi, tan cercano a mi, que me amó con todo lo que tuvo en su momento y que finalmente nos perdimos.

Yo ya he sido inmensamente amada.